martes, 19 de marzo de 2024

Omne nado.

 


Contaban y cuentan que no existe, pero sí es y está, desde siempre, no necesariamente sera un objeto o un lugar. La nada puede ser y es, será, un sentimiento... En mi vida sí que lo es. Es un ancla que no se deja soltar de un fondo y del profundo mar de desperdicios de emociones. Residuos de una experiencia que te oprime y no te deja respirar, no con normalidad.


La culpa, el miedo, y todo lo estúpido y lo absurdo me ata con y a ese ancla, mais quiero soltarme. Avéces no existen palabras ni momento para expresar lo qué un cualquiera lleva coah.

En mi, exista io en las vidas que tenga que vivir, jamás lo entenderé, nunca, y no repetiría.


Comprendo que hay nadas más difusas o más espesas, más oscuras, más densas, por decirlo de alguna manera para hacer de conectar, pero a mi menguado alcance...no voy desde aquí.


Busco y rebusco, como muchos o como aquellos que vagamos sujetos a esas misereas emocionales (imagino, por no haberme tan sola), en todos los parámetros psicológicos, soluciones, aclamo comprensión, pero mierda, no cabe, no ha.


Y,,, te queda vivir sin sentir, sin ser el total o la mejor parte de ti y a mi, me pena por de más, joder es como pasear por caminos desamparados, sin vida, sin otros, a solas y siguiendo un compás ficticio.


La negación es: omne nado total y absoluta, tiempo perdido. Pero es evidente que todas estas letras solo se comprenden cuando has coexistido en la misma frecuencia, si no, todo queda en mera teoría, que aunque ducho en comprender, no vistes la piel. Que pecados.


Más allá, quedan palabras de consuelo, palabras que no mitigan la perdida y sí a la comprensión de un todo sin sabor, un vendaje mal logrado, el recurso de una pobre supervivencia emocional que no resiste al embate de la verdad sin disfraces.


El perdón y la aceptación, vocablos, descifrar su significado es tarea mayor, la teoría de la hipocresía queda parca en simplemente un corchet de tiempo.


Y al final de sobre todas, siempre queda Onme nado pero con mascara.



domingo, 25 de febrero de 2024

Al ligero ;) cual la pluma.

 El tiempo, un espejismo... Soñar que lo alcanzó... con una sensación de entusiasmo, casi eufórica, ampero... no es en sí el tiempo, si no más certera la voz del decir, que es el espejismo lo que añora la mirada.

miércoles, 17 de enero de 2024

Yo víctima de acoso.

 

Todo tiene su momento, todo empieza en algún punto olvidado del tiempo y todo llega a su final.

Es difícil para mi sentarme a escribir y describir con palabras lo que continuara, tengo la idea de lo que quiero expresar o gritar o decir pero lo cierto es que no sé como lo voy a hacer,  tanto miedo contenido, tanta frustración provocada, tanta rabia, tanta vergüenza, tanto dolor, tanto esconder lo que siento, en definitiva el resultado es el mismo y aunque yo reprima mis sentimientos o lo que esta situación me hace vivir, no cambia nada, la tortura no se afloja.

Ya no quiero estar para nadie, hoy por lo menos no, mañana no lo sé, todavía.

Sé, que este blog no tiene difusión, a este día en el que escribo soy conocedora de que el mío fue un espacio saboteado y enterrado en lo más profundo de internet, un suceso fortuito y alejado en el tiempo, tengo relativas visitas pero muchísimas de ellas son spam, de vez en cuando algún lector despistado entrara y leerá mi contenido, alguien real, pero... si no dejan un comentario nunca lo sabré. Mis comentarios están sometidos a moderación, para protegerme, en el transcurso de esta terrorífica confesión, confió en que si hay alguna persona real, que por casualidad en el presente o  en el futuro, lee hasta el final de esta entrada, aunque sea lejano o cercano pueda o podrá comprenderme. Ponte en mi piel, te lo pido por favor considerado lector.

Os pido disculpas por mis faltas de ortografía pero hablo desde el corazón, que de eso tengo mucho.

Empiezo, no me extiendo más. Voy a escribir y relatar cual es mi situación actual con relación al acoso que estoy sufriendo, nuevamente u otra vez, aún y todavía; No quiero traicionarme y espero ser valiente para no callarme y no tener  más miedo, miedo, miedo  de decir quienes son los personajes que cometen estas ilegalidades conmigo y contra mi, lo cierto es que no puedo seguir adelante en ninguno de los aspectos de mi vida si esto no termina, si no lo digo, si no lo suelto, por eso tampoco me importaran las repercusiones de mis palabras, soy consciente de que mis acosadores lo leerán y generaran alguna estrategia para destruirme definitivamente, me da igual, tengo tanto dolor que empiezo a no existir, no puedo vivir más encerrada en esa esfera de caos y aire con escaso oxigeno en la que me han encerrado, necesito y con urgencia, recuperar mi vida y mi libertad, es miá y la voy a recuperar muy a pesar de la furia  que se pueda desatar, claro que intentaran callarme, No te Jo, son crueles y se divierten conmigo; Pero no me voy a callar, aunque se practique una quema de brujas con mi persona. No me callo más, que  cobardes, malas personas, perdón pero es mi rabia la que habla ahora y ya esta bien quiero que hable, necesito sanar, soltar.

Mis acosadores pertenecen a la policía autonómica vasca, (Buumm) escrito está, por fin, que liberación. Por favor, no me juzgues, no culpabilicemos más a las victimas, no me culpabilices si no sientes empatía, si no puedes ponerte en mi posición, amable lector, en esta experiencia de vida que me a tocado vivir, yo soy la victima.

Os contaré: como practican algunos personajes con poder y sin escrúpulos, el acoso policial, haciendo y obrando así ilegalmente y cometiendo delitos impunemente, por supuesto que no creo que todos los policías actúen así, los tiene que haber muy humanos, competentes y profesionales, seguro que muy comprometidos con los ejercicios de su trabajo, pero yo ya no creo en la policía y estoy en todo mi derecho.

A mi: se me escuchan mis conversaciones a través del móvil, existen aplicaciones accesibles y ellos tienen la llave de todas las puertas, ¿Qué cómo lo sé? La respuesta es sencilla, después de once o doce años de extorsión, de persecución, de acoso, en fin resumiendo con un claro ejemplo; dudo mucho que ningún secuestrado de su libertad, no busque la manera de como liberarse, durante todos los días de su cautiverio. Las ideas a veces caen del cielo, la respuesta es: que sé que me escuchan porque les he tendido trampas, en las que han caído. Sí, resulta que este tipo de personas deshumanizadas, suelen ser confiadas por costumbre o despistadas o demasiado seguras, en definitiva no me preocupa el por qué o el como ha sido pero es lo que es. Parecería mentira, cualquiera lo diría, yo antes solía pensar que la policía tendría que tener un nivel elevado de humanidad, de criterio objetivo, un nivel de preparación de  muchos y variados estudios, entre otros psicológicos, un aprendizaje de conducta en base a las puertas abiertas que tienen hacia todo y sobre todo el del conocimiento a cualquier tipo de información, en fin eso era lo que creía yo  en otra vida, la de antes del 2012. Hoy por hoy, no soy tan ingenua, son torpes y  me refiero a los que me hacen este daño o a todas las persona que se pasean a si mismos de la mano de la maldad, supongo que la seguridad en la que se mueven este tipo de personas malvadas o sin identidad, les hace confiados y caen en sus propias trampas. Los seres humanos ni somos tan perfectos ni somos tan inteligentes, por eso es más sabio moverse en la bondad, todo se da mucho mejor.

También otro modo de extorsión al que me suelen someter repetidamente y al que me tienen acostumbrada, suele ser; cuando estoy con: mi hija, mis padres, mis amistades, compañeros de trabajo, familiares, vecinos, con quien sea, se aproximan y escuchan mis conversaciones, suelo quedarme paralizada, a pesar de que lo que estemos hablando sea banal. Esto suele ser muy habitual a lo largo de estos años, No todas las personas a las que conozco saben cual es la situación que vivo. Cuando estoy  con mi hija suelo tener conversaciones más profundas, lógico, por supuesto, es mi amor y siempre hay algún personaje escuchando, son muy conscientes de que sé quienes son y yo sé que saben que lo sé. Me han analizado de arriba abajo, me conocen perfectamente, incluso mejor de lo que me conozco yo, creo,  siempre llevo una mordaza en la boca, siempre apretando los dientes, hasta hoy, porque hoy es el día en el que  todo llega a su fin, me libero lo cuento a los mil vientos,  que el cielo disponga, asumiré, y yo todos los días de mi vida desde el comienzo de esta situación y desde el momento en el que comencé a despertar y a darme cuenta de lo que me estaban haciendo, no hay día en el que no este buscando, la manera de escapar de esta tortura, de esta locura. No tengo miedo a las consecuencias, porque estoy dispuesta...  a gritarlo muy alto, además lo estoy haciendo publico desde este mismo instante, desde ya, desde este momento, cosa que me daba mucho terror.

Como siempre, la maldad no tiene color, claro que llegando hasta aquí, me pondrán como si estuviera loca, pufff me habrán puesto tantas veces, continuo...tengo pruebas o no las tengo; de todo lo que cuento y lo que contare, pero tengo una historia que ya estorba en mis adentros, que oscurece mi alma y lo hago y lo relatare como pueda, desde la primera coma, pero no me lo trago más, ya no me lo callo, no puedo. Casi todos los días me esperan al llegar a casa desde hace ya tantos años, puede ser:  un hombre solo o una mujer sola o pueden estar en pareja dos, pueden ser personajes diferentes pero aunque a veces me resulta difícil reconocerles, siempre son los mismos con sus pelucas, con sus disfraces, con sus malas intenciones hacia mi, para confundirme, para intranquilizarme, en algunas ocasiones que son las mínimas y dependiendo de quien de ellos o de ellas esté, no se involucra tanto y no ve la necesidad de interactuar conmigo pero cuando esta el artífice de esta locura, les dice a sus subordinados a sus instrumentos voladores, que me miren con cara de: de mal, con cara de desagrado haciéndome sentir como si yo fuera un monstruo o la persona más horrible, la cosa más desagradable a la que te resultaría difícil mirar, ponte en ese momento, por favor amable lector, me dedican una mirada de asco rápida y se quedan mirando mi reacción, o me miran fijamente con cara de que les incomodo, o les debo algo, es así como me miran, no se como  explicarlo mejor, es así como me hacen sentir y lo hacen con mucha conciencia y deliberadamente. subnormales, lamento y pido perdón por mis palabras mal sonates, pero muy a pesar de que con ellas me condene al pozo más oscuro de la tierra, por las consecuencias de las que mis palabras traerán, no las pienso retirar, no me da la gana, no cambiare ni una coma, me sale del corazón y quiero liberar este sentimiento que me encoje, joper, soy muy buena persona, no me lo merezco. Y así gota a gota te van creando paranoias, que palabra más fea, pero tan acertada, te van envolviendo en esa espesa bruma de dinámicas en la que todo tu mundo se confunde. No puedes escapar, siempre te esperan, te controlan y aquí no voy a especificar mucho el como lo hacen, porque soy muy consciente de que me podría meter en un lio por desvelar como lo hacen, son esas cosas que solo se pueden decir ante un tribunal, o a tu abogado llegado el momento, si se da, no se puede poner en riesgo como trabajan y  muchas gracias a que yo lo sé. Alguien se dará cuenta de que digo la verdad, seria un poco loco y absurdo, hasta temerario por mi parte inventarme y publicar semejante historia. hay cosas que si no las has vivido por mucha imaginación que se tenga no puedes saberlas, no te las puedes inventar. Entonces encontrando a mi Dios y que mi Dios me proteja. Ha habido días en los que se me olvida todo y no puedo recordar, se me borra, pero otro día vuelve todo, ha sido  mucho tiempo o palabrota, palabrota.


Muchas veces hacen comentarios a gritos para que los vea, hay de mi si es que quiero no mirar a nadie, no hay manera, se meten en mi campo de visión, eso me hace ir mal, interactuar mal con todos los demás ciudadanos, aunque he aprendido a tener muchísimo autocontrol y a limitar mis emociones, a esconderlas, estoy por asegurar que hasta eso les desagrada y les hace insistir más aún más, valientes cobardes, no sé que pretenden, verme llorar?, sangrar por los ojos?, que me estrelle con el coche? que les insulte? para tener una excusa para arrestarme, me vienen vivencias de todo esto según voy escribiendo, es una situación muy jodida  porque nuca sé donde me van a sorprender ni que toca hoy o si mañana me darán un respiro y así, voy aprendiendo a sobrevivir, a salir sin esperar nada, cómo lo hago?. Soy una feliciana, sencilla en mi interior, que se hace feliz a si misma con una flor o con un rallo de sol, con un insecto curioso o una planta bonita en cualquier ventana, en esos lugares nunca están ellos. creo que esa simplicidad me salva. 

Todos mis contactos saben, que si a mi me pasa algo; tengo un accidente en la carretera, o me suicido,... (porque no me han faltado ganas de mandarlo todo a la mierda...),(pero no, no soy una suicida, jamás lo he sido, quiero señalar esto en letras muy grandes, pero he de reconocer que ellos me han provocado deseos de hacerlo, años atrás, mi yo del pasado nunca  hubiera creído que diría esto hoy) ...y casualmente me quitaran del medio... pido empatía, pido comprensión, en el ahora o en el futuro, si es que alguien que no sean ellos me lee.

Ya he perdido la cuenta de todas  las veces que me han dado sustos en la carretera mientras conducía, en algo más de un año cuando seguían esa estrategia, me volví muy torpe en la conducción, imagina que vas conduciendo tranquilo o tranquila por una carretera, a una velocidad apropiada y de la nada aparece un coche haciendo el amago de chocar contigo, o te viene una sin ninguna vergüenza en tu calzada pegando un volantazo, sin ton ni son, justo cuando esta a tu altura, muchas veces muchísimas, ya sabes sometiéndome a un estado de tensión continuo, de nervios, de estrés pero tienes que conducir, para ir al trabajo o a donde quiera que marches. Después siempre se encargaban de que supiera que habían sido ellos. De que me quedara claro. Todo esto te pasa factura en el trabajo y lo acabas perdiendo, por una razón  o por otra, la meterás, es lógico, no vas a decir en una fábrica a todos tus compañeros o a tus encargados, disculpen señores pero hoy no iré a trabajar porque no he podido dormir, verán me acosan unos policías, tus relaciones familiares se ven muy afectadas porque estas en crisis y no te pueden ayudar, además saben hacerlo muy bien de manera que tus familiares no lo vean claro. Es una palabrota locura es más te hacen verte y sentirte así. En todas y cada una de mis publicaciones fotográficas un recuerdo, una anécdota, a priori negativa y con muy mala intención, hubo persecuciones sin sentido, en fin se me cruzan los recuerdos y no lo pienso corregir, que quede como  lo pienso así como lo escribo, no pretendo que quede bonito, solo quiero soltar y decir, pienso ahora mientras lo recuerdo y escribo que: en el fondo, sin quererlo, todas las fotografías que he sacado refrescan mi memoria y por supuesto que pueden eliminar este blog y mi vida también pero por supuesto no lo pongo en duda, pueden  intentar callarme la boca y sabotearme en mis trabajos y con mis nuevos conocidos pero yo paso de todo, que decida el cielo.  

Al hilo de que todos mis contactos lo saben y de que las nuevas personas que entran a mi vida lo saben, de que lo voy contando por aquí y por doquier me convenga decirlo, es súper difícil, contarlo, es una historia tan abstracta y rocambolesca que comprendo que muchos se asombren y no me crean o que desaparezcan, pero lo hago por mi, por vez primera antepongo mis necesidades ante las de los demás, quiero ser egoísta y me encuentro en esa necesidad, de contar. Cuantos más sepan lo que me pasa, más podrán asegurar que les conté, si fuera el caso que me eliminan de la ecuación. Pues bueno, alguno hablara digo yo. Y si no fuera así, en fin, desapareceré habiendo hecho lo posible por liberarme. No tengo ninguna intención de mudarme de este  mundo, aunque flojee y me sienta muy mal en lo más profundo de mi alma, pero no sé. Todavía me queda sonreír al arco iris y eso me salva, la naturaleza, mi Dios. Me preocupa una mierda si mis palabras les provocan diarrea, si mañana me las repiten riéndose o se ríen a mi cara, o me pegan o me pisan o lo que quiera que se les ocurra o me detienen, cuento con todo y voy yo sola y con nada, me preocupa una mierda si voy contra mi misma por expresarme así, si el que me lea, cree que me echo tierra. La vida que me hacen vivir es como estar muerta. Siento la necesidad de insultarles porque en el fondo soy menos que eso. Y tengo rabia y dolor y todas esa sensaciones  y emociones que me cuesta tanto reconocer públicamente  por aquí, porque sé que las leerán y es lo que precisamente de lo que esto se trata, de verme destrozada. Hoy me di cuenta  de que una personalidad  psicópata dirigía la orquesta, por fin al verlo claro y descartar todas las demás posibilidades, por fin podía hablar, podía contarlo.

El acoso al que me someten también consiste en anticiparse a todos mis destinos, en una entrevista de trabajo, o en una reclamación (sobre una multa que me pusieron, (indebida)) en el ayuntamiento de mi pueblo, ante el jefe de urbanismo, contare al detalle en la siguiente entrada, ese día, el porque y el como fue), en la UCI, cuando estuve ingresada, en la UCI¡¡¡, surrealista y enfermizo por su parte, en el médico, y sobre todo vete a saber que cosas les dicen de mi, a las personas que van a mantener la entrevista o la conversación que sea conmigo, tienen las llaves de todos los sitios, y las personas no tienen la culpa de creerles, ellos que saben, no tienen porque saber cual es la verdadera situación. están en su derecho de pensar que soy una impresentable o una asesina o una suicida, de creer lo que quiera que les vendan, todas esas personas están en su derecho de no cuestionarse y ser un poco más críticos.

Jopear, como han jugado conmigo a lo largo de todos estos años, no tenia el valor de enfrentarme a lo que venga, tenia miedo, quizás me metan en la cárcel y arruinen mi vida para siempre pero es que... he aguantado muchísimo tiempo  y muchísima mierda y no me queda paciencia, ni aire que compartir con ellos, basta ya, hasta aquí he llegado.

Hubo otro estilo de estrategia, lo cuento, era un tiempo en el que opte por apenas salir de casa, solo compras una vez a la semana y a veces más días sin salir, en vez de ir a mi pueblo o al supermercado más cercano, cogía el coche y me trasladaba a media hora de distancia, la necesidad de ver el cielo o a otras personas  era mucho más fuerte que el miedo. 

En cada caja de pago, a la hora de poner mis compras, se anticipaban y no sé que les decían a las cajeras pero siempre me paralizaban a mi en la caja, y me observaban, esto paso en el centro comercial Gorbeia de Vitoria, durante un año, rebuscando en mis recuerdos, podría  llegar a concretar fechas, de esa manera alguna dependienta siempre podría recordar, fueron muchas y alguna se negó a colaborar, haciéndome ver por si acaso, lo que estaba pasando, claro esta que por muchas mentiras que quieran contar, no todo el mundo colabora con ellos. Cualquiera o no todos los que estén trabajando en en una gasolinera o en un trabajo publico, por mucho que te venga un policía, diciéndote o acreditando que lo es y pidiéndote que retengas unos instantes a la persona que va a entrar o llegar a tu caja, con la falsa excusa de que se me esta investigando o lo que sea que les digan que soy,  o que soy una ladrona, o que soy inestable, o lo que les venga en gana inventar sobre mi, no todos o cualquiera colaborarían, algunos pocos saben decir no, y gracias a y  con esos pocos, pero buenos. Aprendí que muchos se someten sin cuestionar, asumen que si es un policía dirá la verdad, no los voy a judgar, los comprendo,  pero existen esos peros que siempre me han salvado, no todo el mundo colabora con ellos y analizándolo, que mierdas, no es trabajo de las personas que trabajan cara al publico ayudarles. A veces, esas cajeras me miraban y se leía en sus caras la perplejidad o un sano juicio al verme, claro mi aspecto no es el de una delincuente, ni el de una persona altamente desequilibrada, inconsciente o inestable, les miraba y veía como tomaban sus decisiones.  Palabrota, soy una persona muy amable,  una feliciána y por minutos sonriente, vamos que no tengo aspecto de haber cometido un atroz delito o  matado a nadie. Y yo me sentía  muy mal y  me moría de vergüenza pero en esos momentos en los que alguien se oponía yo daba gracias a mi Dios.

Creo que por hoy  y  en esta entrada, no contare mucho más al respecto. Mi forma de expresarme al escribir es otra, me gusta que sea una escritura densa y muchísimo más elaborada, no es de la misma manera al querer comunicar mis más profundos y sinceros sentimientos en estos difíciles e intensos desencuentros pero aunque ahora mismo mientras escribo, me siento tranquila, he profundizado demasiado y tengo que dosificar lo que voy liberando, por supuesto que la siguiente entrada os contare lo que paso con la queja que interpuse al ayuntamiento, en el departamento de urbanismo de mi pueblo, porque a parte de contaros objetivamente como se resolvió, también me apetece contar lo que a mí a día de hoy me cuentan los errores, esos pequeños y sutiles errores del sistema y de las personas que viven o son bendecidos con el dinerito del palabrota sistema. 

Tengo motivos más que sobrados para ser anti sistema y muy pero que muy revolucionaria. Con la verdad de mi mano, objetiva o subjetiva pero la cruda realidad, gracias por haberme prestado atención y haber llegado hasta el final, que no te duela mi mala forma de escribir,  que tengas un dulce despertar donde quiera que te encuentres y quien quiera que seas.





miércoles, 13 de septiembre de 2023

Remedo de miedo.

 


Apotegma que me suspende en el aire, más bien... el que sujeta y conecta, el oxigeno que respira mi cuerpo, con mi alma; tan frágil, la vida se muda cuan danzarín ante los míos ojos y soy consciente de que; pende de hipar lo que no existe, no para mi.


He de endilgarme conmigo y no traicionarme, reconocerlo para mis adentros o gritárselo a las paredes que conforman mi único bohío, no soporto esta vida de roñosería, de mixtificación de los sentidos, este vació inmenso en el que estoy abismada, si fuera sencillo ya lo hubiera logrado, ya me hubiera quitado la vida pero: no es, ni cómodo, ni sencillo… no lo es.


Todas las tardes sin faltar una, visito las vías del tren, en un tramo en el que el páramo esta desolado, alejado del pueblo, olvidado de todo, de fácil acceso, ni siquiera las aves del cielo lo frecuentan; espero y veo como pasa el tren de las seis y cincuenta y tres, con un retraso que oscila entre cinco y siete minutos pero no más, siempre lo espero con ansias, la noche anterior lo he meditado y repasado en mis desvelos, lo repienso mientras lo espero y no, no tengo fuerza.


Reconozco que hay visitas, en las que mi nerviosismo es extremo pues, no albergo dudas de que ese día sera, más no tengo el valor, pienso en las personas que viajan en sus vagones, en el trastorno que les causaría tamaña locura o si por mi culpa pudiese descarrilar, también tengo miedo al dolor, seguro que sería una muerte instantánea pero... y si no lo es.


Hoy mientras esperaba a mi ultimo tren, me dio por buscar otra asechanza, quizás una muerte más dulce, algo que implique menos riesgos para los demás, menos merito de valor, un fárrago de ideas se asoman por poniente, empero, no dan gusto al pecado de carecer de dolor.


Tal descompás, mina mi mansedumbre e incrementa más, mi tan inveterado apetito de hacer, es algo inexplicable lo que se siente y sobre todo los motivos, esos que te asaltan en las noches oscuras de alma, como íncubos venidos del infierno, que emergen de cualquier descuido para recrearse en las sombras del pasado.



Nota: (escribir por escribir, esto no alberga relación con mi realidad).







miércoles, 6 de septiembre de 2023

Ruth despertando al huracán.

 

Me encuentro en una gran plazoleta de suelo empedrado pero invadido por hierbajos mal segados, también esta cubierto de tierra rojiza, esparcida en porciones irregulares, el lecho por el que caminan mi alma tiene desniveles, todo se ve con aspecto descuidado pero eso la hace más hermosa si cabe, las pocas luces que se filtran entre las hojas de los gigantescos árboles que la custodian, la dejan en penumbras, sin embargo un resplandor que parece emerger de la propia hierba que la habita te deja desentrañar con claridad, todos sus misterios, todo lo que percibo hace que me sienta muy bien y que respire paz con todos mis sentidos. Camino sin rumbo, dejando que el instinto me hable, de la nada aparecen delante de mis ojos un grupo de personas adultas, están formando un circulo entre ellos, hombres bajos y altos, hay unas cuantas mujeres apartadas del circulo pero participan de la peculiaridad que les hace diferentes entre si pero iguales, es una sensación extraña la que me trasmiten, actúan como si jugaran a pasarse una pelota invisible los unos a otros, algo místico me invita a continuar hacia ellos pero ellos no me ven, al rebasar su altura uno entre todos me corta el paso, mientras los demás paran el inmaterial juego, sin moverse de su sitio, se limitan a esperar, a escuchar, al mirar el rostro del hombre que tengo delante, me doy cuenta de que sus ojos son totalmente blancos y aunque los dirige hacia mi creo que no me ve, toma mi mano haciendo que me detenga y me dice; ten cuidado con el soplo del espíritu, lo manda Ruth. Sin decir nada más me empuja con suavidad y me insta a pasar dentro del circulo, dudo unos segundos, mirando a cada uno de los participantes del extraño juego, sin saber que es lo que tengo que hacer y vuelvo a tener la sensación de que ninguno de ellos me ve, me pregunto que es lo que esperan de mi, debo continuar mi camino o esperar a algo que no sé que es, pero ellos reanudan nuevamente su juego aunque esta vez comienzan a gritar al unísono, ten cuidado con el soplo del espíritu, lo manda Ruth y lo vuelven a repetir una y otra vez en una armonizada composición rítmica pero sin música. Comienzo de nuevo a andar y no sabría decir si algo asustada, intranquila, preocupada, pensativa, no logro distinguir la sensación que me causan sus palabras, la paz anterior se a desvanecido, tampoco me encuentro mal pero va emergiendo una alerta, la voz del instinto despierta.

Abandono la plaza por un camino situado a su derecha, de pronunciada inclinación cuesta arriba, parece un camino de monte, no tardo mucho en subirlo y justo al llegar a lo alto miro detrás de mis pasos para sorprenderme al ver como un huracán se inicia en el centro del circulo y observo como todos los componentes del mismo, uno por uno van entrando en el mismo y me doy cuenta como se apagan sus voces hasta que no queda ninguno de ellos, en ese momento se crece y se hace de una fuerza extraordinaria, el huracán se agita y comienza a girar sobre si mismo como si quisiera darme un poco más de tiempo para escapar, no puedo dejar de sorprenderme, al darme cuenta de que carece de ruido y al mismo tiempo que me percato de ello, comienza a engullir todo la plazoleta, sus losas, sus árboles e incluso edificios de los que antes no tuve consciencia, la rapidez y violencia con la que se agita, hace que salga del asombro y de la curiosidad hipnótica con la que el huracán me ha cautivado y empiezo a correr sin saber hacia donde huir, improviso sin dejar de moverme mientras me percato que se acorta la distancia de ser engullida por el colérico viento, que remueve paredes, ventanales, pórticos y barandillas de piedra, todo agitándose en un oleaje de polvo y escombros que pugna por arrastrarme en su furia pero me da tregua, opto por subir unas escaleras para vislumbrar la salida, al llegar a lo alto de ellas, un hombre espera, me pregunto a quien espera, a caso no ha advertido el huracán que viene detrás de mi, intercambia unas breves palabras conmigo que no consigo entender, él no se mueve, se queda anclado e indiferente allí, agarrando con fuerza, con una sola mano a la barandilla de piedra de el final de las escaleras, mientras que con su mano izquierda, gesticula con ademan de brindarme impertérrito aplomo. Sus ojos me dicen mucho más de lo que comprendo en sus palabras. Lo ultimo que recuerdo es que mire hacia atrás y después todo fue agitación y eternas nubes de polvo denso y olas enormes de escombros, nunca sabré si agarre la mano que me tendió o que fue de él, si se salvo, si me salve yo.



martes, 1 de agosto de 2023

Non Succumbunt Universi.

 

A la velocidad de la luz, rasgando el vació, rumbo hacia un universo desconocido, en mi cabina estanca no se advierte la fuerza de la gravedad, las partículas y el tiempo no hacen su función, no existen. Es una constante y no percibo su propagación, tras la búsqueda de un nuevo vilallato allá donde quiera que esté, me voy de mi planeta, abandono tierra.

Es un viaje en solitario, pasaje solo de ida, no cabe posibilidad alguna de regresar, el estado de la nave no lo soportaría, no dejo nada que valga la pena atrás, zumbidos y celajes, árida de la entrega, de tanto acatamiento, la virola que sujetaba mis tobillos dejo mella en mi piel pero sanara. Lejos, lejos, hacia travesía retrepada en mi inconsciente. El latido telepático se pierde en el aithér con la distancia diabólica que me arrolla.

A la búsqueda de una nueva humanidad, lejos de allí, olvidaré lo que conocí, será fácil, un vació infinito me espera, que marca y marque jalón. Logré traspasar las fronteras de los centinelas y salir de mi planeta, ya no seré un número de identidad, una maquina más de esa locura, que fuerza a la población a sucumbire en su esencia. Desconozco lo que encontraré, no me concierne verdad alguna que dejé atrás, finiquité mis trampas con todos los demonios del infierno y con los ángeles del cielo, libre soy.

Navego escuchando  Paint de Roxette a todo volumen, envolviendo el silencio del frío cosmos e imagino mi tan anhelado destino, lo fabrico guija a guija, es una obcecación ahora en mi. Viajo con henchida de luz a mi zaguán, llena de ustible, recargo energía del resplandor de las estrellas que captan los paneles del fuselaje de la nave.

Prófuga del oxigeno que contamina mi antigua morada, un planeta que muere cacho a cacho por tanta asquedad, tanta locura, tanta agresividad, la hostilidad de la mayoría de las almas que quedan alimentan el mal, lo mantiene y no es para mi, yo pude escapar en busca de otra humanidad. Desde el infinito mandare mensajes al utópico reencuentro con mis hermanos de vida en la misma franja de tiempo, hasta finito, inagotable hasta mi ultimo aliento.

Diario de a bordo. 1-8-2023.

domingo, 30 de julio de 2023

El hombre de las mil caras.

Todavía no sé, si es real o forma parte de los espectros de mi imaginación, esos espectros que me persiguen en los sueños para advertirme de algo que debe de acontecer en mi vida, a veces amables y otras no tanto pero espectros.


Lo insólito del hombre de las mil caras, es que un día decidió traspasar la frontera que separa esas dos realidades, trastocando todo mi inventario de ideas.


El viene a verme, sorprendiéndome, inquietando mi calma, a veces grita verdades o mentiras al los cuatro vientos, cosas que solo sabe él, a veces solo, otras en compañía, suelo pensar que es un loco olvidado y perdido de su ayer o del mío, no sé, todavía no lo alcanzo a comprender, me pregunto que quiere de mi, por qué actúa así, qué confusiones o impedimentos radican en su mente para no poder desenvolverse como un individuo normal, confusiones que a su vez me contagian, haciéndome permanecer en un estado de incógnita perpetuo, al borde del abismo donde se confronta lo mágico de este mundo y de la cordura de la mente humana, con la locura; Quien es?, Qué necesita de mi?, Qué es lo que le hace venir del otro mundo y comunicarse conmigo de forma tan abstracta.


Quisiera conversar con él pero no logro alcanzarlo, algunos  días viene me mira y se esfuma, se pierde detrás de las sombras de las miles de personas que transitan por la calle, otros días un reflejo me impide reconocerlo, incluso verlo y solo un movimiento hace que lo advierta allí  pero no lo veo, se camufla disfrazando su aspecto y solo cuando ha desaparecido algo en mi interior me dice, que era él, otra vez. Para qué?


Siento como si él estuviera perpetuando un juego perverso y diabólico conmigo, generando confusión en mi espíritu, es algo que le divierte? Hay algo en mi que lo hace venir una y otra vez?, Le alimenta mi confusión?


Sé que los espectros de este mundo o de aquel, no tienen móvil, ojala lo tuvieran y yo pudiera ponerme en contacto con el hombre de las mil caras, para saber cual es su cara real, la que oculta, porque me gustaría... conversar con él, que me sacara de dudas, tengo muchas preguntas que hacerle, sin embargo algo muy dentro de mi me dice que ese encuentro normal, no pasara, le asusta o le divierte?


Ojala, viajero invisible me conceda el deseo de desentrañar tanto misterio y de soltar toda esta confusión que a la simpleza de mi forma de vivir esta trastocando y causando tanto dolor.


Ojala, el hombre de las mil caras se prestara a volverse un poco mas humano y no fuera tan volátil, tan difuso, tan impulsivo, tan temeroso.